El Torcal de Antequera
El Torcal de Antequera es un paraje natural único, declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco. Su formación se debe de un proceso que ha durado varios cientos de millones de años. Para ello deberemos remontarnos unos 200 millones de años, cuando gran parte de Europa y Oriente Medio se encontraban sumergidos bajo el mar de Tetis, se inicia un proceso de sedimentación carbonatada, originada por la acumulación y deposito de esqueletos, conchas y caparazones de animales marinos en el fondo del mar que durará unos 175 millones de años. Estos sedimentos se han ido acumulando y compactando en diferentes niveles, formando los estratos horizontales de espesores de miles de metros.
La presencia del Hombre en El Torcal se remonta a la Prehistoria, concretamente del Neolítico Medio, hallándose yacimientos arqueológicos en la Cueva del Toro. Existen otros yacimientos que atestiguan la presencia humana en El Torcal VIII milenios A.C. Algunos de ellos son: La cueva de la Cuerda, cueva de Marinaleda, Sima del Hoyo… y otros en superficie como el del Hoyo del Francés, Hoyo del Tambor o Fuente de la Higuera.
Igualmente, se han recogido restos más recientes de origen romano que apuntan hacia el uso en cantería de los recursos geológicos del lugar, usándose las calizas en la construcción de villas próximas al Torcal: Anticaria, Osqua y Nescania.